Fútbol solidario

CINDY LUQUE J.

Ayer el fútbol ha dado una clase magistral de solidaridad. Sin hacer distintinción de colores o camisetas, todos pudimos disfrutar un excelente partido entre los futbolistas del Real Madrid y los del Murcia, todo en beneficio de los damnificados del terremoto de Lorca.

Sinceramente me quito el sombrero ante el Real Madrid que ha sido el único equipo que ha aportado su granito de arena para darle alguito de alegría a todos los lorquinos y así aliviar sus penas por haber perdido todo (sus casas, sus negocios, sus vidas). Desde la mañana de ayer los madridistas visitaronLorca para animar a ese pueblo que aún no han podido recuperar el sueñpo tras el sismo de hace una semana.

Los madridistas no solo han venido, han estado en las calles lorquinas saludando, firmando camisetas, sehan sumergido entre la multitud, han dado palabras de ánimo y han visto cómo han quedado los barrios más afectados por el terremoto. Sensiblidad a tope. Yo no soy del Madrid, pero tengo que decir que se han portado los chicos todo el equipo, incluido Mou. Olé por ellos.

Pero no podemos dejar de lado a los jugadores murcianos que han dejado todo en el campo de fútbol, uno incluso vino directo de Canadá para apoyar esta causa. El gran Camacho ha sido el artífice de la alineación murciana que sinceramente ha desplegado toda su destreza en el campo y no se ha dejado amedrentar por los madridistas que sacaron a todas sus estrellas como Cristiano Ronaldo ( que aunque era un partido benéfico, se le notaba su actitud competitiva y las ganas de meter gol), Kaká, Ozil, Benzema, Alonso, etc. Y claro, no podemos obviar el espectáculo que dio Chendo, que se metió a la cancha y dio muestras de que a pesar de no jugar hace más de una década sigue dominando el balón.

En fin, un partido que reunió en el Estadio de la Nueva Condomina a más de 30 mil almas unidas con un solo fin, aportar su granito de arena para los damnificados de Lorca. Las entradas que oscilaban entre 5 a 30 euros se acabaron rápidamente. En fin, ayer todos salimos ganando. Un 2 – 2 como final para este partido benéfico no podía ser mejor.

Ojalá otros equipos de fútbol de España tomen este ejemplo y muestren su apoyo al pueblo de Lorca que necesita de su apoyo y sobre todo de sus palabras de ánimo. LORCA LOS ESPERA.

Lorca, una semana después

LIDIA ROSELLÓ

Una semana después del terremoto parece que Lorca empieza, poco a poco, a retomar la actividad diaria. He estado varias veces desde que ocurrió el terremoto en esta ciudad y siempre me voy con tristeza. Desde que empiezas a adentrarte por la ciudad y vas viendo calles desiertas, edificios medio derribados, cruces o círculos de colores en las puertas… te va sobrecogiendo el alma.

Calles desiertas

Son muchísimas las personas que no quieren volver a sus casas, unos amigos se han quedado sin poder entrar a su vivienda y la verdad es que cuando los vi aún estaban en shock por lo sucedido. Según me comentaron es algo indescriptible y que solo lo sabes si lo experimentas. Ellos tuvieron que dejar a sus dos gaticos en la casa por en el primer terremoto los animales se escondieron y no los encontraron… así que después del segundo se temían lo peor. Finalmente, hubo suerte y los gaticos están sanos y salvos en su nueva casa con sus dueños.

La Avenida de Lorca

Una de las cosas que más me ha impactado ha sido ver a muchísimos inmigrantes con maletas y bolsas sentados en las puertas de los edificios y con la mirada perdida. Escuché a uno hablar por una cabina telefónica y decía: «estamos bien… el consulado de Ecuador nos va a alojar a todos», quizás hablaba con su familia y quería transmitir tranquilidad pero lo mirabas y se me estremecía el alma…  Cuando dejas Lorca, te llevas un poquito de tristeza en el corazón, yo he vivido mi adolescencia y época universitaria en esta localidad y le tengo especial cariño porque allí conocí a gente maravillosa y por eso no soy muy objetiva pero quería transmitiros  mi vivencia en Lorca los días posteriores al terremoto.

No olvidemos lo que ha pasado y seamos solidarios.

¿Quieres espectáculo, sobriedad o arte?

LIDIA ROSELLÓ
La Semana Santa es una de las épocas en las que se deben vivir momentos de gran recogimiento interior. Es momento para la reflexión y para encontrarse con uno mismo y con Dios. En diversos puntos de España esta época se vive de diferente manera, la tradición marca los eventos de cada lugar. Lo mismo ocurre en una misma región, así pues, en la Región de Murcia existen tres procesiones muy importantes, pero cada una con un marcado carácter muy diferente a la ciudad vecina, me refiero a Lorca, Cartagena y Murcia.
En Lorca, la Semana Santa se vive desde fervor y la pasión de sus habitantes, es una puesta en escena de distintos capítulos de la Biblia. Los caballos irrumpen con gran fuerza la Avenida de Lorca, levantado al público de sus asientos para que griten y muevan el pañuelo que los identifican como pertenecientes al paso blanco o al paso azul. Sin embargo, la llegada de las vírgenes apacigua esas almas exaltadas para dar paso a los más remotos sentimientos de paz y devoción.
La Semana Santa de Murcia es muy bonita, compuesta con los mejores tronos que pudo elaborar Salzillo con sus magníficas manos, son momentos de pasión y fervor donde los murcianos y los turistas que acompañan a los tronos se deshacen en alagos y sentimientos encontrados, por una lado, la admiración por tanta belleza expuesta en las mejores calles de Murcia y por otro, el sentimiento que recorre al procesionista y que salpica a todo aquel que pasa por su lado.
Y en tercer lugar, destaca la Semana Santa de Cartagena, con su gran sobriedad y su paso firme y estructurado, propio de los militares que años atrás inundaban estas tierras. Las procesiones de Cartagena engloban al turista o visitante en un ambiente lleno de recogimiento y de admiración ante tanta metodología, tanto orden, señorío y rigurosidad ante el paso.
Una de las procesiones más emotivas de esta ciudad es la del Silencio, que tiene lugar el jueves Santo, al paso de la Vírgen por la Iglesia de la Caridad, el silencio que inunda las calles es roto por algún alma que necesita cantar una saeta a su Vírgen, en ese momento el espectador de tan emotivo paisaje no puede más que turbarse y sentir como un escalofrío invade su cuerpo.
O la procesión del Encuentro, hecha para los más trasnochadores. El encuentro de los tres Santos te transporta a una época pasada en la que lo único que importa es amar al prójimo con independencia de lugar, sexo o condición social: Todos somos hermanos. No importa si eres californio o marrajo.
Por cierto, si vas a Cartagena no debes dejar de beber un «reparo» en la Uva Jumillana, te hará entrar en calor.

Semana Santa de Cartagena

Así que te recomiendo, que si tienes oportunidad, vivas la Semana Santa que tu prefieras: pasión, belleza o señorío, pero eso sí: Participa de la Semana Santa.