No siempre es buen momento para una buena noticia

images
Cuando me quedé embarazada de Gabriel quise contárselo a todo el mundo, decirle a todos que esperábamos otro angelito y que nuestra familia iba a crecer. Pero como siempre, mi marido y yo hemos sido cuidadosos con este tema, preferimos dar la primicia a nuestros padres y hermanas, y pasados los tres primeros meses al resto de la familia y amigos.
 En otros círculos de amigos tuvimos que callar, esperar y ser prudentes. ¿La razón? Casi al mismo tiempo que yo recibía esta preciosa noticia, otra persona cercana se enteraba de que había perdido a su bebé de semanas, había tenido un aborto espontáneo y lo estaba pasando fatal tanto física como emocionalmente. Cada vez que oía sobre su situación  y sobre cómo iba asimilando la pérdida de su hij@, se me hacía un nudo en la garganta. A veces hasta me sentía culpable, lloraba, pensaba cómo yo podía estar celebrando la presencia de una nueva vida mientras que otra mujer lloraba por su pérdida.
 www.vidaysalud.com
Cada vez que mi esposo quería dar la noticia de nuestro embarazo, surgía algún comentario sobre la situación de estos padres que estaban atravesando por esta situación y nos callábamos. Mi alegría a veces se convertía en tristeza al oírlos. Así pasaron varias semanas. Ya mi incipiente barriguita empezaba a notarse y era momento para decirlo, justo cuando las aguas se iban calmando. Nos sentimos más aliviados por contarlo y por saber que esta pareja de amigos estaba mejor.
Se estima que la tasa de abortos espontáneos es de uno de cada cinco embarazos (un 20%). Algunos expertos afirman que estas cifras son mayores, llegando a un 50%, pues muchos abortos espontáneos suceden cuando las mujeres ni siquiera se han dado cuenta de que estaban embarazadas.
Es importante tener mucho tacto cuando tienes a alguien cerca que haya atravesado o esté atravesando por esta situación. Si quieres hacer algo, puedes darle un abrazo para animarl@. Dejarl@ hablar. Recuerda que no solo la mujer pasa por este trance,  el marido (o pareja) también. Pregúntale a él cómo está, cómo se siente. Si es muy cercana, pasa tiempo con esa persona y ayúdala en lo que necesite.
Lo que no debes hacer es un cálculo de cuánto tiempo le llevará recuperarse. No des por sentado que habrá otro embarazo. No minimices su pérdida  con frases como “aún eres joven  y puedes intentarlo otra vez” o  “la naturaleza es muy sabia y es mejor esto a que nazca con algún defecto”.  Esto me lo digo a mi misma, porque en algún momento he caído y he dicho alguna de estas frases, pero con el tiempo he aprendido que cada uno lleva su dolor de manera diferente y a veces las palabras o comentarios sobran en estos casos. Ponernos en el lugar del otro ayuda a comprender el dolor y no meter la pata.

De nuevo por el barrio

CINDY LUQUE J.

Había estado algunas semanas sin ganas de escribir, miraba el ordenador, abría el Word y luego me iba dejando mi documento en blanco. Estaba sin ganas de  teclear, de plasmar con palabras todo lo que tenía en la cabeza… creo que fue la flojera la que me hizo dejar pasar tantas semanas sin decir ni muuuuu  a través de este blog. No sé si alguna vez les ha sucedido: tener muchas cosas en mente y querer compartirlas y por dejadez no haberlas dejado en papel o en un documento de Word. Bueno, pues les aconsejo que cuando les pase, mejor que venzan su aburrimiento y lo escriban, porque luego pasados los días esas cosas no están tan claras o simplemente se fueron de nuestra cabeza.

Ahora si que he vuelto a coger el teclado y espero seguir usando este medio- el blog- que me sirve para estar en contacto con todo aquel que quiera leer alguna cosilla y para hacer un poco de terapia, jajajaja. Sí, terapia para cuando estoy aburrida sin saber qué hacer, o simplemente para compartir con mis amigos de aquí y de allá (Perú) algunas cosas que salen de mi cabecita loca y otras que salen de mi corazón.

Pues bueno, allá vamos una vez más, esperando no perderme por mucho más tiempo sin dar señales por aquí.