Desde hace unos días veo a mi hijo sin ganas de comer, fastidiado, y por las noches se mueve, se rasca, suda, se irrita y sufre al no poder descansar bien. Es que el verano en España ha empezado fuerte, hay días en que la temperatura llega a más de 45 grados. Por eso he empezado a ponerle un ventilador en su habitación para que la refresque las primeras horas de la noche. Y por la mañana, tengo su habitación con las persianas bajas y las ventanas cerradas para que se mantenga fresca. Aún así debo seguir algunos consejos que su pediatra me ha dado para cuidarlo de las olas de calor y que lo comparto contigo para que tomes tus precauciones si tienes un bebé.
Consejos
- Los recién nacidos pueden enfriarse rápidamente, pero no es necesario que los abriguemos en exceso si hace calor. Ellos también tienen calor como tú.
- A la hora de vestirlos, es mejor ponerles ropa ligera y fresquita, de tejidos suaves y fibras naturales como el algodón que le permitan transpirar.
- Debemos mantener a los bebés bien hidratados, ya sea con tu leche materna, con sus biberones, o con agua.
- Si tu niño ya come, es mejor que las comidas, sobre todo en verano, sean más ligeras. Yo en la cena le doy a mi hijo cremas de verdura, que son menos pesadas y más líquidas.
- Otra opción para que beban más líquidos y coman fruta son los batidos. Yo hago batidos de fresa con leche, de plátano con melón. Eso si, sin azúcar. Es una forma divertida y refrescante de comer frutas en esta temporada.
- Si vas a la calle o a la playa evita que tu hijo se exponga directamente al sol, sobre todo entre las horas con más incidencia de rayos UV, 10 a.m.- 4 p.m. Si sales de paseo, protégelo con gorros o sombrillas.
- Nunca te olvides del protector solar. Yo siempre uso uno con factor de protección (FPS) de 50. Nunca se debe dejar a los bebés expuestos directamente al sol; es bueno que les dé la luz indirecta.
- Después de un día de playa, hay que hidratar la piel de los pequeños con su crema habitual.
- Dentro de casa debemos mantener una temperatura adecuada, abriendo ventanas cuando menos calor haga para refrescar las habitaciones, alejando al bebé de zonas calurosas como por ejemplo la cocina.
- Si usas ventiladores o aire acondicionado ponlos a un nivel suave y que no incidan directamente en el pequeño.
- Y si estás en casa, fuera ropa, el pañal es suficiente.
- Otra cosa que me aconsejó la pediatra de Andrés es que en esta época tan calurosa del año es mejor no echarles cremas anti rozaduras, salvo que sea necesario, lavarles las partes íntimas con agua y jabón con cada cambio de pañal y secarlos muy bien.
Con el calor también llegan los fastidiosos mosquitos que pueden ser los peores enemigos de nuestros pequeños, si quieres algunos consejos prácticos de cómo alejarlos, mira el post que escribí sobre este tema http://nubr.co/vdkjHT
Espero que estos consejos te sirvan.